El restaurante está situado a los pies de un edificio del antiguo Milán, en su interior consta de dos espacios: la sala principal que gravita alrededor del mostrador del bar y una sala más pequeña que da a la cocina, diseñada para experimentar plenamente la relación con la comida, desde su preparación
RØST de Milán. Un diseño interior que habla de tradición y autenticidad
Desarrollado en 65 metros cuadrados, el restaurante se concibe como un lugar acogedor, entre la tradición y la modernidad, al igual que la cocina propuesta. El ambiente es simple, sin ficciones para centrarse en la relación del huésped con la comida, creando un ambiente capaz de acompañar la experiencia gastronómica con discreción y sobriedad
Los tonos son cálidos, dominados por el color rojo "Marsala", que hace referencia a la relación fundamental con el vino y la tierra. El uso del material es cuidadoso y limitado, reducido a unos pocos tipos básicos (cal, latón, roble) como si fueran los ingredientes de una receta del menú
Frescos con cal, las paredes tienen dos tonos, el más oscuro de los cuales crea una especie de boiserie irregular que forma una línea de horizonte. El tema del mobiliario se caracteriza por el estilo milanés: materiales nobles como el mármol, el latón, el terciopelo y el cuero caracterizan el ambiente sin ser pomposo, en contraste con las paredes de cal y el suelo
En la entrada, una gran pared muestra a los protagonistas del restaurante: es el Wall ofFame, 16 platos de cerámica, cada uno de los cuales representa a un productor de las materias primas utilizadas en la cocina.En el lado opuesto, el mostrador del bar destaca por su larga y sólida tapa de roble y su revestimiento vertical, hecho de perfiles de latón natural con diferentes secciones
El valor de las preexistencias está atestiguado por la elección de preservar el piso original, un sembradío en trozos de pórfido. Temas queridos por Vudafieri-Saverino Partners, la continuidad con el pasado y la relación con los recuerdos, que encuentran una nueva expresión en el candelabro de la sala, diseñado por Tiziano Vudafieri. Fue realizado ensamblando en losdifusores faros de coches de diferentes épocas, lo que representa un homenaje a la historia del taller de autopartes que desde siempre había habitado el espacio
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