Espacio para eventos en Bélgica. Nuevas soluciones creativas para la Capilla transformada

El estudio belga Klaarchitectuur quiso reutilizar una capilla abandonada para colocar su estudio, que no es solo un espacio de oficina, sino un espacio de eventos, que quiere mostrar cómo la arquitectura puede intervenir e inspirar

Creado para ser un espacio de trabajo de vanguardia, "The Waterdog" quiere casi convertirse en una experiencia espiritual, abandonando la idea de oficinas "aburridas", que en cambio deben ser una fuente de inspiración, un lugar donde el pasado, el presente y el futuro estén vinculados estrechamente

El proyecto surge de la idea de apilar las distintas oficinas en las que los distintos departamentos se distribuyen en varios niveles, creando un sentido constante de dinamismo en el espacio de trabajo. "The Waterdog" es, ante todo, una oficina de arquitectura de Klaarchitectuur, que en tal función se utiliza para desarrollar aún más el futuro arquitectónico de Bélgica

Uno de los requisitos más importantes, al inicio del proceso de diseño, fue volver a abrir el edificio histórico al público, obtenido mediante la creación de un gran espacio abierto en el corazón de la antigua capilla, mientras que las oficinas son una colección de cajas. El espacio restante se ha liberado para crear un área atractiva y multifuncional, que se puede utilizar para una amplia gama de actividades, de esta manera, un edificio que ha tenido muchas características en el pasado y ha desempeñado un papel crucial en la vida de este muchos, pueden una vez más revivir y servir a una comunidad entera

De inicio a fin, el proceso de diseño fue una búsqueda de soluciones creativas con los desafíos planteados por la reestructuración de un edificio histórico como este. La renovación se limitó a mantener el carácter histórico del edificio. Esto se logró al erigir un nuevo edificio, completamente separado del edificio histórico. El nuevo edificio tiene un marcado contraste con el anterior, que aún hoy cuenta la historia de su pasado