Casa jardín en Cipro Espacios compartidos y terraza urbana para un nuevo diálogo social

Devolver la naturaleza a la ciudad es un imperativo cada vez mayor, especialmente para ciudades como Nicosia, que no ha hecho del verdor y las áreas públicas comunales una prioridad en su planificación urbana. Durante el aislamiento hemos redescubierto el valor esencial de nuestros hogares, dándonos cuenta una vez más de la necesidad de más espacios exteriores

La necesidad de salir libremente para disfrutar de los espacios exteriores y conectarse con la naturaleza se ha vuelto más importante que nunca. Pero una vez más la cuestión del virus vino sólo para destacar lo que ya se sabe, el deseo de acelerar el proceso de incorporación de la naturaleza en nuestras ciudades de maneras creativas

El diseño hace hincapié en el potencial de los jardines urbanos privados y los microclimas que crean para mejorar las condiciones de vida dentro de las ciudades y frenar el calentamiento global. La casa busca establecer una relación unificada entre el vecindario, el jardín privado y el parque público.  Elementos urbanos como el edificio, la calle y el espacio público no se tratan como actividades absolutas, sino como una única configuración homogénea, la casa se convierte en parte del parque y el parque se incluye en la casa

La integración de zonas verdes en la casa incorpora la plantación de jardines en el 60% de la planta baja, el uso de terrazas verdes en el primer piso, la provisión de paisajes aptos para las abejas y 40 tipos de flores silvestres autóctonas. Todas las áreas internas fluyen hacia los espacios exteriores y se organizan alrededor de un patio central verde situado entre dos volúmenes cúbicos blancos